Por supuesto, el trípode es la base de la cámara, y este debe ser medianamente robusto, no hace falta que sea un trípode profesional, cualquier trípode medio que se vende en centros comerciales nos hará bien el trabajo, y la calidad de este dependerá solo de lo que realmente queramos gastarnos en el, yo por ejemplo he realizado mis fotos con un trípode que no ha costado más de 35 euros.
Una vez situada la cámara en el trípode y buscada la situación para hacer las fotos, tenemos que conectar el cable disparador a la cámara, de manera que podamos activar el disparo sin tocar la cámara en ningún momento.
Este disparador debe permitir el bloqueo del pulsador, ya que usaremos el modo B “bulb” de la cámara, y esto nos evitará tener que estar pulsando todo el rato el botón, y solo lo haremos en el momento de iniciar la foto, y posteriormente en el momento de terminar.
La posición B es totalmente manual y el tiempo de exposición o realización de la foto depende exclusivamente del tiempo que nosotros le demos, y según que tipo de fotos.
Antes de realizar la foto es importante revisar el anillo de enfoque para asegurarnos que en foco está correcto, (usando enfoque manual) generalmente suele ser al infinito, captando parte del horizonte con algún tipo de motivo, árboles, casas, montaña o simplemente el cielo.
Las ópticas o lentes recomendables en estos casos son principalmente los gran angulares, desde los estándar hasta los ojo de pez, salvo que queramos fotografiar algún planeta como Júpiter que es bastante visible junto con sus lunas, en estas fotos seria de usar un teleobjetivo al menos de 300, 400 o 500 de focal.
La sensibilidad o ISO dependerá también del tipo de foto o resultado que queramos hacer, en el caso de exposiciones largas para captar trazos, es recomendable 100 – 200 ISO según también la luminosidad del objetivo. - Foto planeta Jupiter -
Para fotos con el cielo tal y como lo vemos, es mejor usar ISOS altos con apenas unos segundos de exposición. En cuanto a la temperatura de color, suelo selecionar el modo auto, aunque se pueden hacer unos previos y selecionar la que más nos interese.
Como dije en el apartado anterior, el firmamento se mueve constantemente debido a la rotación de la Tierra, y durante la noche lo podemos notar con el cambio de posiciones de las estrellas, constelaciones y demás objetos.
Es por ello que cuando hagamos fotografías con exposiciones largas, 30, 40, 50 minutos o incluso más... captaremos el trazo “recorrido” de las estrellas, por ese movimiento.
Otro detalle a tener en cuenta en las opciones de nuestra cámara es la de usar el cierre de espejo ya sea directo o usando el temporizador a 2 seg. Esto hará que el espejo se cierre antes de realizar la foto y de esta manera evitaremos posibles vibraciones mínimas que pueden afectar a la imagen final, sobre todo si luego haremos ampliaciones de las tomas.
Una vez todo listo, podemos empezar a realizar las fotos, eso si, con calma y sin prisas, haciendo si es posible diferentes exposiciones y comprobando a través de la pantalla LCD de la cámara los resultados.
Hay que recordar que las cámaras generalmente disponen de una función de reducción de ruido que, si la tenemos activada tendrá que procesar este ruido para eliminarlo durante el mismo tiempo que hacemos la foto, lo que quiere decir que si realizamos una exposición larga de 40 minutos, después de acabar de hacer la foto tendremos que estar prácticamente otros 40 minutos o quizás algo menos en los que la cámara elimina el ruido de la imagen.
De todos modos es una opción que recomiendo poco, por un lado, porque la imagen tendrá bastante más ruido del deseado que luego habrá que editarlo en el ordenador con programas de reducción de ruido, pero sobre todo y principalmente porque durante las exposiciones largas, el sensor / CCD se calienta especialmente, y si realizamos una foto justo después de haber estado 30 o 40 minutos anteriormente, el “calentón” del CCD y el ruido que podemos tener en la próxima foto puede ser MAYÚSCULO.
Es por ello que tras una exposición larga y tras la eliminación del ruido de la cámara a la foto, recomiendo apagar esta durante al menos un par de minutos para que el sensor baje su temperatura y se enfríe relativamente para la próxima foto. Esto es especialmente notorio en las noches de verano donde la temperatura suele ser agradable e incluso alta, mientras que en invierno cuando hace bastante frío, es algo que curiosamente agradece el sensor y este se calienta mucho menos.
Recordar el hecho de que si añadimos elementos del entorno – horizonte, siempre es importante incluso en estas fotos, una buena composición con estos.
Tanto para la observación Astronómica como para Astrofotografía es importante tener localizada la estrella polar para posteriormente buscar otros objetos o constelaciones...
¿ Como encontrar la Estrella Polar ?
Para localizar fácilmente la estrella polar a simple vista, lo más rápido es buscar la constelación de la Osa Mayor o también llamada “El Carro” (o también la sartén), una vez localizada esta, debemos trazar una línea imaginaria desde su “canto” lateral, que nos llevará hasta esta, y que a su vez nos indica el Norte Geográfico. Una de las fotos más típicas en este tipo de fotografías es la de localizar la estrella Polar que es la que indica el norte y que hace que en las exposiciones largas todas las estrellas giren alrededor de esta, consiguiendo así los famosos trazos circulares, aunque no necesariamente tienen que ser siempre las fotos en esta zona, y podemos buscar otras distintas.
También es interesante comentar el hecho de que incluso con exposiciones bastante cortas de apenas 5, 10, 20 segundos podemos captar algunas nebulosas como la M42 en la constelación de Orión, y subiendo el ISO incluso podemos captar el llamado “camino de Santiago”, esa especie de polvo sutil blanco que recorrer el cielo de lado a lado, y que no es otra cosa que nuestra propia Galaxia, la Vía Láctea, vista de perfil o de canto.
Otro de los objetos que es posible fotografiar y que incluso se puede llegar a apreciar a simple vista en lugares muy oscuros es la Galaxia M31 en la constelación de Andrómeda. Solo pensar que has captado un objeto que está a 2,5 millones de años luz, me pone la piel de gallina....
Puede pasar que de la casualidad que el campo de visión que tengas sea una ruta aérea y te pasen aviones cada x tiempo con lo que tendrás unos trazos de estos o si tienes suerte podrás captar algún meteorito en el tiempo que haces la foto, algo que suele pasar en ciertos meses del año que hay una mayor actividad de entrada de estos en la atmósfera, o quizás incluso puedas captar el paso de un satélite artificial, el cielo da muchas posibilidades.
Por último, existe la posibilidad, aunque no necesaria, de usar flashes externos o linternas antes de terminar la exposición de la foto, de manera que podemos iluminar los elementos de primer plano o del horizonte para que se aprecien en la foto detalles de estos, en algunos casos esta opción puede ser interesante, pero en otras es preferible tener simplemente la silueta o contorno del horizonte.
Como ya habréis visto, hemos hablado de realizar siempre las fotos sobre un trípode, de manera que en las exposiciones largas, el cielo sale movido mientras que si sacamos detalles o elementos del horizonte, este sale siempre fijo.
Pero existe otra opción diferente aunque mas avanzada y complicada, que solo puede hacerse mediante una montura ecuatorial, ya sea especifica para fotos o la que se incluyen en algunos telescopios, y que además disponen de un motor de seguimiento.
Lo que hacen estas monturas, una vez colocadas correctamente en posición (lo que se llama – poner en estación) es la de seguir el movimiento propio de rotación de la Tierra sobre un objeto en el firmamento, de manera que al localizar uno, este queda en todo momento en el foco fijo, durante todo lo que dura la noche.
Esto permite si acoplamos la cámara a un telescopio, ya sea con un adaptador al visor de este, o simplemente montada sobre este pero sin mirar a través de este, o usando una montura específica nos permitirá tener siempre el foco fijo, y de esta manera hacer exposiciones más largas de horas., Hay que tener en cuenta que incluso haciendo fotos a través del telescopio, los objetos mas débiles de luz como son galaxias o nebulosas requieren mucho más tiempo de exposición. En estos casos, al contrario que ocurre con el trípode, el firmamento estrellado permanece fijo y si en la foto habían elementos del entorno-horizonte, serán estos últimos los que saldrán movidos
Pero sin duda alguna si hay un objeto celeste en la noche que predomina y destaca de los demás, ese es nuestro satélite, la Luna. A esta se le pueden hacer interesantes fotos, tanto en fase Llena como en creciente, menguante, así como los famosos eclipses de Luna, captando muchos detalles de su superficie e incluso notar su relieve especialmente en las fases de cuarto al tener la luz de forma lateral.
Para hacer fotos a la Luna, es recomendable tener un buen teleobjetivo 200, 300, 400 o 500mm. Con el uso de focales tan largas cualquier mínimo movimiento afecta al resultado final con lo que es importante tener mucho cuidado para evitar trepidaciones, activando el cierre de Espejo y por supuesto, disparando igualmente con cable disparador y el trípode. Respecto al tiempo de exposición, nos olvidaremos en este caso de la posición B para pasar a velocidades entorno a 1/125 – 1/250 aprox y jugando con los ISOS entre 100 / 200, según la luminosidad de la lente.
En lo que respecta a nuestra estrella, el SOL, lo he dejado para el final al tratarse de un objeto celeste que básicamente su observación es durante el día, y más allá de las interesantes y bellas imágenes de amanecer o atardecer, podemos captar también algunos momentos o detalles interesantes, ya sea con teleobjetivo o con telescopio.
Los eclipses de Sol, son uno de los fenómenos astronómicos más espectaculares visualmente y fotográficamente hablando, especialmente si se trata de eclipses totales de SOL.
Hay que recordar y hacer mucho énfasis en el peligro que existe de ceguera o quemaduras en el iris si observamos al Sol directamente, por lo que es recomendable mirarlo solo con la protección debida, como pueden ser los filtros de soldadura o filtros especiales de observación con telescopio o lentes. Estos son fundamentales para poder mirar directamente. También existe la posibilidad de usar otros filtros a nivel fotográfico como son Cokin de alta densidad y degradados para realizar las fotos durante la fase del eclipse, aunque no tan seguros para mirar directamente.
En el caso de los eclipses totales, solamente en el momento de máxima ocultación, es posible observar el fenómeno a simple vista sin filtros.
Aparte de los eclipses, también puede ser interesante observar la actividad solar mediante sus manchas solares, o el tránsito del planeta Venus por el disco solar.
Una vez hechas las fotos y que estemos ya tranquilamente en casa, podemos incluso hasta curiosear e indagar para saber que es lo que sale en las fotos, ya sean estrellas u otros objetos, a través de programas de simulación en nuestro ordenador, de manera que dando la fecha, hora y localización aprox podemos ver el cielo tal y como estaba el día de las fotos, y de esta manera reconocer y descubrir elementos que aparecen en la imagen.
ALGO MÁS QUE FOTOS :
Mirar al Universo es de alguna manera descubrir cosas interesantes, también es un viaje en el tiempo, y así ocurre con los objetos celestes, según están más lejos de nosotros.
Por ejemplo, como dije anteriormente, la Galaxia M31 está situada a 2,5 millones de años luz de distancia, y esto quiere decir la luz que vemos ahora mismo de esta galaxia, salió de ella hace 2,5 millones de años y por lo tanto, es una imagen del pasado.
Si nos venimos algo más cerca, tenemos la estrella más cercana al Sol, Próxima Centauri, que está situada a 4,22 años luz, lo que quiere decir que la luz que vemos de ella salió hace 4 años.
De hecho la luz de nuestra estrella el SOL tarda 8 minutos en llegar a la Tierra desde que sale de este.
También es interesante saber, como si observamos algunas fotos hechas en las exposiciones largas en las que contemplamos los trazos de las estrellas, y en donde descubrimos como en realidad estos tienen diferentes colores, cuando a simple vista esas estrellas parecían todas blancas. Y ciertamente ese color tiene relación con el tipo de estrella que es, o lo que es lo mismo su tipo o clase espectral, que las diferencia unas de otras, según su tamaño, temperatura y color.
Puedes ver algunas fotos del artículo y otras más en mi galería de Flickr:
http://www.flickr.com/photos/clickfotoblog/sets/72157606608537985/with/3502957200/
INFORMACIÓN DE INTERÉS :
TIPO ESPECTRAL
http://es.wikipedia.org/wiki/Tipo_espectral_(estelar)
VÍA LÁCTEA
http://es.wikipedia.org/wiki/V%C3%ADa_L%C3%A1ctea
SISTEMA SOLAR
http://es.wikipedia.org/wiki/Sistema_Solar
ESTRELLA POLAR
http://es.wikipedia.org/wiki/Estrella_Polar
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